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Directora de Centro NAVE realizó residencia artística en Jordania con miras a estrechar lazos con el sur global
Como parte de la línea curatorial Dorsal, Jennifer McColl Crozier, directora artística y ejecutiva de Centro NAVE, realizó una residencia en Studio 8, con el objetivo de fortalecer y mantener instancias de colaboración interdisciplinar entre Jordania y Chile.
A pocos meses de la celebración de los 10 años de Centro NAVE, Jennifer McColl Crozier, directora artística y ejecutiva de Centro NAVE, participó de una residencia artística interdisciplinaria llamada Remal Lab, organizada por Studio 8 (Eigth Studio for Performing Arts Education), una organización de la ciudad de Amman, capital de Jordania.
A fin de encontrar inspiración para procesos creativos, unir puntos en común, intercambiar ideas y perspectivas, la residencia tuvo una duración de 20 días y reunió a 21 artistas y profesionales de la cultura, tanto de Latinoamérica, como de diversos lugares del mundo, entre ellos Costa Rica, Ecuador, Colombia, México, Líbano, Ruanda y Chile.
Esta experiencia constó de tres etapas, la primera tuvo lugar en Amman y transcurrió en MMAG Foundation, un centro de investigación artística y cultural de la ciudad; la segunda se extendió por dos semanas, y tuvo como escenario la inmensidad del desierto Wadi Rum (Valle de la Luna), para en una tercer momento regresar a la ciudad a una exhibición final.
A lo largo de este viaje, la directora de Centro NAVE comentó que es buen momento de confluir con artistas e instituciones culturales para reflexionar en torno a los tiempos de creación, los desafíos y oportunidades. “Fue interesante ver que algunos contextos son bastante similares, como el financiamiento por ejemplo y preguntarse ¿cómo estamos haciendo las cosas? ¿Cuánto dura una residencia? ¿Por qué es importante hacer residencias, por ejemplo?”, explicó.
Si bien la ciudad de Amman fue la principal anfitriona, el corazón del desierto de Jordania se convirtió en el paisaje propicio para que las y los participantes de la residencia pudieran conectar a través de prácticas colectivas. Lo que finalizó con una muestra de los proyectos una vez que las y los participantes regresaron a la ciudad de Ammán.
“Una de los aspectos más relevantes de este viaje de colaboración entre Jordania y Chile tiene que ver con una intención que NAVE ha declarado hace un par de años y con miras al futuro hacia sus diez años, y es generar y sostener vínculos con lugares del mundo con los cuales no es tan común relacionarnos, en particular con el sur global”, comentó la directora de NAVE.
En cuanto a la internacionalización de NAVE, a través de su desarrollo en los últimos años, el espacio ha buscado nuevas alianzas tanto en Latinoamérica como en Asia y Oriente. En esta línea, según la directora, en este tipo de instancias en que confluyen y conectan diversos proyectos, es un buen momento para continuar construyendo alianzas.